Autoestima Y Asertividad Ante Presiones De La Pareja
Autoestima
La autoestima es un término utilizado en psicología
para reflejar una persona ‘s general de evaluación o valoración de su
propio valor. estima abarca autónomos creencias (por ejemplo, “soy
competente”, “Yo soy digno”) y las emociones , como el triunfo, la
desesperación, el orgullo y la vergüenza . La autoestima puede aplicarse
específicamente a una dimensión particular (por ejemplo, “Creo que soy
un buen escritor y me siento feliz por eso”) o extensión global (por
ejemplo, “Creo que soy una mala persona, y se sienten mal sobre mi en
general “).
Psicólogos por lo general lo que se
refiere la autoestima como una característica permanente de la
personalidad (“rasgo” auto-estima), aunque lo normal, las variaciones a
corto plazo (“estado” auto-estima) también existen.
Sinónimos o casi sinónimos de la autoestima son:
“autoestima”, “autoestima”, “respeto de sí mismo”, y
“auto-integridad. De acuerdo a The American Heritage Dictionary del
Idioma Inglés, “ amor propio “es” el instinto o el deseo de promover un
bienestar “.
Definiciones
La definición normal original presenta la autoestima
como un cociente se obtiene dividiendo los éxitos de una de las zonas de
vida de importancia para un individuo dado por los fracasos en ellos o
un “éxito / pretensiones”. Los problemas con este enfoque proviene
de lo mismo autoestima depende el éxito: implica ya que la inestabilidad
inherente fallo puede ocurrir en cualquier momento. presente. A
mediados de la década de 1960 Rosenberg Morris y social-teóricos del
aprendizaje se define la autoestima en los términos de un sentido
estable de valor personal o dignidad. Nathaniel Branden en 1969
define la autoestima como “… la experiencia de ser competente para hacer
frente a los retos fundamentales de la vida y ser digno de la
felicidad”. Según Branden, la autoestima es la suma de confianza en sí
mismo (un sentimiento de capacidad personal) y respeto de sí mismo (un
sentimiento de valía personal). Existe como consecuencia de la sentencia
implícita de que cada persona se acerca, por un lado, su capacidad para
enfrentar los desafíos de la vida, es decir, para entender y resolver
problemas, y, por otro lado, su derecho a lograr la felicidad , o, en
otras palabras, a respetar y defender sus propios intereses y
necesidades. Este enfoque de dos factores, ya que algunos también lo
han llamado, proporciona una definición equilibrada que parece ser
capaz de hacer frente a los límites de la definición de la autoestima
principalmente en términos de competencia o solo vale la pena.
En psicología, la “autoestima” es la opinión
emocional profunda que los individuos tienen de sí mismos, y que
sobrepasa en sus causas la racionalización y la lógica de dicho
individuo, tambien se puede expresar como el amor que tenemos hacia
nosotros mismos.
La autoestima es un sentimiento valorativo de nuestro
ser, de nuestra manera de ser, de quienes somos nosotros, del conjunto
de rasgos corporales, mentales y espirituales que configuran nuestra
personalidad. Ésta se aprende, cambia y la podemos mejorar a partir de
los 5–6 años cuando empezamos a formarnos un concepto de cómo nos ven
nuestros mayores (padres, maestros), compañeros, amigos, etcétera y las
experiencias que vamos adquiriendo.El mantenimiento de una buena
autoestima es una tarea mayor de cualquier psicoterapia, pues suele ser
un síntoma recurrente de los variados problemas conductuales humanos, la
presencia de actitudes hipercríticas no-racionales hacia sí mismo.Renny
Yagosesky, orientador y autor del libro “Autoestima en palabras
sencillas”, considera que la Autoestima es una función del organismo y
un recurso integral y complejo de autoprotección y desarrollo personal.
El concepto de autoestima ha tenido papeles
preponderantes en la toma de decisiones en ciertos sistemas educativos.
En particular, a principios de la década de 1990, en Estados Unidos y
otros países anglosajones, la autoestima se convirtió en un concepto en
boga entre algunos teóricos de la pedagogía. La teoría propuesta en ese
entonces, era que la autoestima es una causa de las actitudes
constructivas en los individuos, y no su consecuencia, diciéndose que si
por ejemplo, un estudiante tiene buena autoestima, entonces tendría
buenos resultados académicos. En esta corriente encontramos a autores
como Goleman que apoyan que la autoestima influye en el desarrollo del
coeficiente intelectual. Esta teoría adquirió una gran notoriedad e
influencia entre los responsables del sistema educativo estadounidense,
pero con escasa o nula validación estadística y revisión científica.
Y sin embargo, a pesar de la carencia de pruebas de
tales afirmaciones, los efectos en la forma de estructurar los planes de
estudio y los cursos fueron de importantes a mayúsculos. La idea de
promover la autoestima de los estudiantes, llevó en algunos lugares a la
supresión de cualquier medida utilizada para distinguir a los mejores
estudiantes, para no afectar la autoestima de los que no obtenían buenas
notas. Medidas que por lo general obtuvieron resultados contrarios a
los que buscaban, al no incentivar el desempeño sino la uniformidad.
La autoestima es una o la mejor base de asentamiento
de los sentimientos, desde el punto de vista racional y siempre lo que
se tiene que fomentar es la capacidad del individuo y el sentirse como
tal. Y la ausencia de todos los sentimientos negativos sobre su
capacidad e inseguridad.